Al caer la noche los cestos apilados esperan el último viaje del tractor. Forman un bulto de sombra en mitad del camino. Los hombres se sientan en el suelo y algunos sacan un cigarrillo y fuman. Las vendimiadoras ríen en corro mientras los últimos rayos del día les iluminan el cansancio del rostro. Las vides parecen levitar, sin frutos entre las hojas y ahora, ya, solitarias tras un día de trasiego. Exultante, el dueño va de unos a otras, saluda y reparte sonrisas. Ha contado los cestos y ha multiplicado. Solo para él, es la noche de fin de año.
domingo, 1 de octubre de 2017
La vendimia
Al caer la noche los cestos apilados esperan el último viaje del tractor. Forman un bulto de sombra en mitad del camino. Los hombres se sientan en el suelo y algunos sacan un cigarrillo y fuman. Las vendimiadoras ríen en corro mientras los últimos rayos del día les iluminan el cansancio del rostro. Las vides parecen levitar, sin frutos entre las hojas y ahora, ya, solitarias tras un día de trasiego. Exultante, el dueño va de unos a otras, saluda y reparte sonrisas. Ha contado los cestos y ha multiplicado. Solo para él, es la noche de fin de año.