miércoles, 29 de julio de 2015

Becqueriana / 73


En una mano el hervidor y en la otra la tetera. El agua se esfuerza por mostrar su sueño de ser nube. Un ramillete de hierbabuena canturrea impaciente sobre el mármol de la cocina. En la mesa, sobre el mantel de cuadros, hay alineadas dos tazas y, en medio, un plato de barro con galletas de avena. En la emisora que está sintonizada suena un tango cantado con voz de mujer. El último sol de la tarde extiende el brazo por los hombros del clavel en la maceta del alféizar, que reclina la cabeza sobre el pecho de su ámbar.