viernes, 22 de septiembre de 2023

Chimeneas JV / 6



Al final de la senda que abandona el camino tras rebasar el montículo se alza la choza donde habito. Un camastro, una mesa, una silla, un fogón. En el redil una sola oveja bala en pies trocaicos. Sus ancestros conocieron a Ulises, pero los míos solo supieron hablarme de ti. Para el día en el que aparezcas no tengo nada preparado. Me sentaré en un tronco para que ocupes mi asiento, te serviré la sopa en mi plato y yo la rebañaré de la olla. Tan seguro estoy de que no vas a venir como de escucharte deletrear mi nombre.