miércoles, 27 de julio de 2022

Manos | Catorce



Quisiera Apolo compadecerse por algún rechazo amoroso, pero las chicas ya no reparten calabazas o a él no se las dan. Exige poco, una primera cita, dos. Tiene sueldo de analista de producto en una empresa solvente, viste con elegancia, es simpático. Al salir suele entrar en un café, con compañeros, a tomar algo. En un rincón ve leer a una muchacha insulsa que nunca levanta los ojos para mirarle. Por eso se fija en ella. Un día decide acercarse. Dafne se asusta. Su mano desaparece dentro del libro, estira el brazo, mira hacia la calle. Si pudiera, saldría corriendo.