miércoles, 9 de enero de 2013

Grosziana / El parado

George Grosz

En qué travesía el hombre de rostro en sombra se desvía y sus pasos olvidan la entrada al laberinto. En qué instante el itinerario de ayer se ha convertido en el mismo que hará mañana por la mañana y mañana por la tarde. Idéntico al que hace hoy, un domingo en el que la luz, descansada, le presta su mejor azul a las fachadas. Y en el que la farola aprovecha que ahora puede ver para fisgonear a través de las ventanas la vida de los vecinos. En qué edad el gorro se transforma en hongo, el asombro en ceguera.