martes, 30 de julio de 2024

Microlecturas |49 | Paisaje interior



Este segundo libro de Mariángeles Robles es un meditado prodigio de delicadeza, tanto en la vida fugitiva que refleja como en la precisa escritura con la que compone las descripciones. Son poemas en prosa, y algunos en verso, que, siguiendo la senda oriental, otorgan a la naturaleza evocada la condición de pensamiento. La sutilidad del tema se convierte en un “trazo tembloroso hacia la nada” que cuando parece diluirse en el silencio, de súbito, un giro lo petrifica: “quiero que este instante permanezca”. Y emerge con él, en lo volátil, la expresión de su rotundidad, de su consistencia profunda, densa.