lunes, 1 de noviembre de 2021

Cuentos del hada jubilada (cuadragésimo quinto)


¿Sabrá la niebla hacia dónde se dirige cuando se extienden las sombras? ¿Encontrará los senderos y taludes que desea cegar con su presencia en la ceguera de la noche? ¿Hallará en la luna un punto de referencia que la oriente después de hurtársela a los demás? Como no consigo vivir sin resolver estas incógnitas, en noches de fosca me gusta salir a recorrer las calles y las plazas en las inmediaciones del puerto. El hecho de no ver dentro de la no visión agiganta el sinsentido de la irrealidad en la que la única realidad tangible para mí soy yo.