martes, 31 de marzo de 2015

F.C. (In memoriam)


Dibujaba perfiles sesgados con narices siempre aguileñas, se esmeraba en los ojos, en las pestañas. Dibujos que ocupaban el margen de un periódico, el reverso de una factura. A veces aprovechaba el mismo espacio para copiar largas sumas con números de tipografía gótica que a mí me parecían columnas. Descubrió la acuarela con el tiempo. Empezó pintando paisajes con casa. Una serie. Luego animales, otra. Flores exóticas. Y durante los últimos años retratos. Le guardaba las revistas que regalan los periódicos. Su inmensa colección de semblantes me mira hoy desde la pared donde los colgaba. En todos veo su rostro.