JOSÉ ÁNGEL CILLERUELO / LIBROS / ESCRITURAS

domingo, 30 de mayo de 2010

Premonición del blog 2: «Zoo o cartas de no amor», de Vicktor Shklovslki


El libro y la vida se han enredado por completo
V.S.
Vicktor Shklovslki quiere escribir un libro, se lo ha dicho a su editor. Una novela. Añora San Petesburgo en las calles de Berlín. Tal vez una novela epistolar, pero lo que sale es una «novela [que] se compone de fragmentos, es decir, de novelas cortas». Vicktor Shklovslki acaso esté enamorado y como su amada no le deja hablar de amor en las cartas, las palabras huyen del cesto del género como aceite en botella mal cerrada: dietario, crónica de la emigración, crítica literaria, relatos, poemas en prosa: «Me estoy convirtiendo en parte de un libro», o quizá de un blog.

jueves, 27 de mayo de 2010

Canção de amor

Eu Sei que Vou te Amar (Jobim / Vinicius)
El círculo de velas en la playa, una noche sin luna, y en la cabeza la rotación de las esferas impulsadas por la caipirinha. Bañémonos, sugiere Denilson mientras contempla a lo lejos, en el paseo, las ventanillas iluminadas de un autobús en la parada. El océano parece no ser de la misma opinión; su leve rugido, aunque incomprensible, delata un pequeño enfado. Vayamos al agua, insiste Denilson, y le convence a él mismo ver su gesto decidido e ilusionado en el lente de las gafas de Cida. Cuando la fría espuma anega sus pies, Cida le coge de la mano.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Lectura poética, hoy

El camino serpea hacia la ermita. Una brisa leve acompaña el ascenso. A cada paso, la mirada hacia atrás transforma la realidad en paisaje; y arriba, las paredes blancas de la iglesuela le prometen que ha de abarcar aún más, la lejanía. Por el barranco donde el último incendio acabó con los viejos y enormes castaños de indias, sus troncos ennegrecidos claman contra la injusticia de que otros más jóvenes y temblorosos verdeen ahora sin sombra. Lo anotan los ojos y buscan palabras que lo conviertan en ritmo. Palabras como estas, desasistidas de la mañana, de la luz, de piel.


lunes, 24 de mayo de 2010

«Composiciones de lugar», de Andrés Catalán





A partir de convenciones de la tradición —la más recurrente es el alba como encuentro o separación de los amantes— Andrés Catalán (1983) reúne los diversos dibujos que sobre el amor traza el tiempo, desde la seducción —«juegan a ser miradas de los otros»— hasta el encuentro, desde el deseo —«ese puñal de dudas»— hasta las cenizas (o semillas) del alejamiento. No escribe Catalán poemas de amor, sino reflexiones teóricas sobre el amor. En la segunda parte dirige su mirada poética a la ciudad, no para escribir versos urbanos, sino para construir el discurso de la vida en las ciudades.

jueves, 20 de mayo de 2010

Coleóptera

Han llegado con la primavera, como los presagios aciagos en los versos de Eliot. No paran de nacer. Cada día hay nuevas cetonias revoloteando por el terrario que en otoño albergó una simple pareja. Su afición a procrearse ha quedado clara desde el principio. Comen, se aparean. Al parecer quieren ser muchos más coleópteros poblando este insulso planeta que les resumimos, en casa, con un helecho, una bromelia y las mondas de la fruta del postre. Por la noche su excesiva vitalidad retumba como caminar de fantasmas patosos. Hay que saber que están ahí para no asustarse. Ah, las cetonias.

martes, 18 de mayo de 2010

Αγαπούν το τραγούδι

Iannis Xenakis
El barco los trae y el barco se los lleva, dice Agnes cuando alcanzan el promontorio desde donde se contempla el puerto. Y Adrastos piensa en el negocio de distribución de retsina que tiene su padre y tuvo el abuelo de su abuelo. Siempre entre estas cuatro paredes de agua, gime Agnes, y Adrastos la anima: todos quieren verse reflejados en un cielo tan limpio, nosotros ya estamos aquí. Qué palabra más pequeña: aquí, se lamenta Agnes. Pero yo te quiero, un día mi padre me cederá las llaves del almacén. Sí, pero cuando leva anclas, los extranjeros ríen felices.

domingo, 16 de mayo de 2010

El garzón de Ida

cuando el que ministrar podía la copa
a Júpiter mejor que el garzón de Ida,
LUIS DE GÓNGORA

En la carnicería, mientras desliza el cuchillo por la pieza, el dependiente me pregunta, ¿y lo de Garzón, qué te ha parecido? Ponme un filete más, le digo, por si acaso viene algún amigo a comer. Y sonríe, porque en la crisis lo que más escucha es «más delgadito ese bistec». Qué me va a parecer. Todos, garzones de Ida; y al que se crea uno de los dioses, cuchillo de carnicero. Es lo que se ve, aunque quizá sea peor lo que simbolice: una ley ad hominem administrada desde el rencor y la prepotencia aliados. Hoy, por todas partes.

viernes, 14 de mayo de 2010

Desenredarse

Las nuevas versiones de procesadores de textos automatizan acciones que convierten la escritura poética en un disparate. Interpretan los versos como párrafos y un soneto parece un caligrama. No es la única, ni la principal, distorsión. Las redes sociales se han apropiado de la esencia del poema, la emoción —la emoción de encontrar al amigo, la emoción de conocer el instante oculto—, y la divulgan como fin en sí mismo: la agonía del pensamiento estimula las emociones. ¿Y el poema? Insistir es trabajo baldío. Sólo hay una vía: renunciar. Y regresar a la arena, al viento, a los cactus.

miércoles, 12 de mayo de 2010

أغنية الحب

La La Aini La, Wadi al-Safi
Un desagradable aliento a arak le alcanza cuando el guardia de seguridad de la playa privada encañona a Malika con su mirada de desprecio y su farfulla incomprensible porque se presenta en la puerta sola, sin Azzâm. Mi novio habrá perdido el tren, no voy a esperarle en la playa pública, le responde. El mundo se hunde bajo mis pies, clama el vigilante alzándose la chilaba para mostrar sus recias botas militares. Azzâm, Azzâm, antes inventarán una imagen holográfica masculina para pasear con ella que se cuele en algunas cabezas el mínimo destello de lo que ocurre en la realidad.

lunes, 10 de mayo de 2010

Carta a Julio, preocupado por no haber escrito

Por el sinsabor del tiempo que pasa sin que hayas escrito nada no debes entristecerte en absoluto. Todo cuanto hemos escrito los demás se publica en papel químico que no soportará el paso ni de cien años, y además queda registrado en signos herméticos e ilegibles que los programas del futuro ni siquiera se preocuparán por traducir a nuestro viejo alfabeto: habrá tal volumen de escritura en el planeta que la eutanasia literaria será la única solución viable. Así que no escribir y escribir es, a los efectos del último día, exactamente lo mismo: un entretenimiento particular de valor efímero.

sábado, 8 de mayo de 2010

Premonición del blog 1: «Viaje a Italia», de H. W. Goethe

Las divergencias entre este cuaderno de notas y las convenciones diarísticas de la época presagian la escritura que llegará, cuando la técnica lo permita, al blog. Sorprende, en primer término, la elaboración artística que Goethe realiza de la brevedad sin obviar nunca el sentido cotidiano de la experiencia. Los distintos planos de esta —la noticia del clima, la descripción de lugares o el trato con personas— se conjugan poéticamente gracias tanto a la concisión como al juego irónico y cómplice en el que implica al lector que, al mismo tiempo, es él mismo y es otro. Como en el blog.

miércoles, 5 de mayo de 2010

प्रेम गीत

Barso Re, A. R. Rahman
Nadie en la aldea es cualquiera. Dependemos de todos, incluso para merecer un saludo que alegre el día. Hasta el conductor del autobús, que llega una vez por semana envuelto en una nube de polvo, es una personalidad en el pueblo. Le preguntan por su mujer e hijos, y a cada uno le cuenta la misma historia, pero saltándose partes, por abreviar, de modo que el último se queda sin saber nada. Luego se toma un té bajo una sombrilla y dice satisfecho: «El horizonte». Cuando vivamos en la ciudad, amado Paranjoy, ¿quién preguntará por la madre enferma de Vanalika?

lunes, 3 de mayo de 2010

Vida de poeta joven

Aun pareciéndome exacto cuanto dices, hay un factor que siempre me ha dado qué pensar. Desde los años 70 hasta hoy se ha producido un paulatino deterioro del valor de lo editado. La crítica, expectativas, atención lectora y memoria de otros poetas han ido cerrándose hasta enroscarse en sí mismas. Un libro publicado en los 70 era conocido y comentado por todos. Hoy, libros de poetas jóvenes interesantes desaparecen antes de aparecer. No circulan. Nadie habla de ellos. Nadie siente interés por leerlos... si no forman parte de un circuito preestablecido. Hasta cierto punto, se explica ese nerviosismo por existir.

sábado, 1 de mayo de 2010

Песня о любви

Histoire du Soldat, Igor Stravinsky
Sveta aprovechaba cualquier cristalera para contemplar su corte de pelo, en especial le gustaba mirarse de reojo al pasar frente al bar donde se reunían los reclutas parlanchines de un cuartel próximo a su casa: repentinos silencios y miradas atentas, también la suya, confluían en el dulce balanceo de su media melena. Una tarde, junto a la boca del metro, haciendo cola frente al puesto de kvas, habló con un soldado. «Me llamo Rodion», él. «Ah, Rodya», ella. «Estas cosas sólo pasan en las novelas», él. «Pide, que nos toca, Rodya», ella, meneando la cabeza. «Ni en las novelas», él.