miércoles, 4 de junio de 2025

Los mensajes callados, dos



No creo que lo peor que pueda ocurrir sea un día primaveral de niebla. Densa, temible, heladora. Recuerdo a padre maldiciendo al cielo glacial. Reniegos que me hacen dudar entre sentidos, ¿lo que hay detrás del aire impenetrable comprende los insultos? Teme por los brotes tiernos en los frutales, pero a mí solo me interesan las experiencias de vacío que aletargan la mirada. Empezó cuando era niño. Cansado de árboles y peñascos, en la escuela de repente veía cómo la niebla dibujaba cientos, miles de ventanas iluminadas en una noche de rascacielos neoyorkinos. Como en el cartel de una película.