JOSÉ ÁNGEL CILLERUELO / LIBROS / ESCRITURAS

martes, 14 de marzo de 2017

1983-«Fado alejandrino»


—¿Sargento Hemingway?
—¿Quién pregunta?
—Yo, mi sargento.
—¿Recluta Antunes?
—Yo, mi sargento.
—¿Y sabes decir algo además de yo mi sargento?
—Sí, mi sargento.
—Me alegro.
—Gracias, mi sargento.
—De nada. Nos vemos.
—¿Sargento?
—¿Querías algo?
—Sí, mi sargento.
—¿Ahora?
—Sí, mi sargento.
—¿Y sabes decir algo además de sí mi sargento?
— Mi sargento, sí.
—Fantástico. Felicidades.
—Gracias, mi sargento.
—De nada. Pásalo bien.
—Una pregunta, sargento.
—¿Quieres que pierda toda la mañana contigo?
—No, mi sargento.
—¿Así que hay algo que no entiendes?
—No, mi sargento; digo, sí mi sargento.
—¿Te aclaras?
—Sí mi sargento; digo, no mi sargento.