Carrera de relevos donde compite un único relevista por equipo, que se pasa el testigo a sí mismo y en cada vuelta cambia de nombre según el personaje de la Antigua Grecia que le tutele, sea Helena, Edipo o Telémaco, así la vida según el poeta Demetrio Fernández (1987). Igual que las zancadas del atleta cubren los tramos de la pista por donde corre, el libro traza también un arco desde el verso aforístico hasta el soneto, y desde las estrofas de arte menor hasta el alejandrino blanco, variedad métrica con la que conjuga la complejidad y magnitud del tema.