Foto Susana Solano
Para Susana Solano
La luz de la mañana aprende a escribir aforismos sobre el zócalo enlucido en el edificio de la Universidad. Como un estudiante más, desde muy temprano se sienta en la hierba a caligrafiar las mismas palabras cada día, que borrará cada día la oscuridad al anochecer. Le gusta que el metal le guíe el trazo con su firmeza. Que los árboles jueguen sobre sus letras al teatro de sombras. Que el crepúsculo le añada matices violáceos con su paleta de acuarelista. Y disfruta descubriendo inauditos sentidos a las palabras que escribe en la pared cada mañana con su lápiz diáfano.